Los proyectos y centros budistas del Camino del Diamante funcionan a través de trabajo voluntario, no pago, basado en amistad e idealismo. La meta es ofrecer una vía de acceso a las enseñanzas prácticas del Buda y los hábiles métodos que son aplicables a nuestra vida cotidiana. Nuestros centros budistas no son instituciones abstractas, sino lugares donde todos pueden encontrarse para meditar, desarrollarse juntos y participar activamente en el mantenimiento del centro, lo que hace posible todo esto.

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